con los ojos vendados y los oídos tapados.. con ganas de nada... y una sensacion de vacío ahoga su garganta...
de corazón y rodillas peladas.. cada caída deja su marca..
con un interior rico en fuerza sumándole un poco de ira.. sus ojos revelan su tristeza.. pero el no logra ver eso... un espejo egoísta que no muestra más..
una vida.. una eterna lucha y un corazón roto...
dos personas y un espectador..
no me bajes los brazos.. no ahora..
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1 comentario:
sabes mi niña preciosa, que hay momentos en que ya es tiempo de bajar los brazos, que el show que llevaste toda una vida ya no tiene el sentido ni las mismas ganas de seguir luchando cuando tu cuerpo y tu alma estan cansados,pero no es tu caso, tienes la vida por delante, atropella a quien se te ponga por delante,pero por lo menos tu se feliz,los demas no importamos.
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